14 Febrero 2023

“Basta”. Columna de opinión de Elisa Giesen

El Mercurio

Hace semanas que las noticias giran en torno a los incendios y la dificultad para contenerlos, dada la intencionalidad con la que habrían sido provocados y la adversidad que presentan las altas temperaturas del verano...

Hace semanas que las noticias giran en torno a los incendios y la dificultad para contenerlos, dada la intencionalidad con la que habrían sido provocados y la adversidad que presentan las altas temperaturas del verano. Siendo un contexto complejo, el Presidente decidió anticipar un debate en torno a una mejor regulación para la industria forestal. Anticipo que, ciertamente, no cayó bien en la Sofofa que lo calificó como improcedente, a lo que el Presidente retrucó que ‘no le tengamos miedo a poder conversar’.

Frecuentemente, el Gobierno ha hecho uso de la retórica de la valentía para plantear su desinhibición frente a temas que, aparentemente, habrían sido eludidos por otros sectores políticos por no tener el coraje para enfrentarlos; ya sea porque habría habido intereses creados o por la incomodidad que generan. Surge entonces, una suerte de carácter heroico y desafiante que se cree capaz de abordar los tabúes del pasado. Tanto así, que tenemos —al menos— cuatro procesos de reformas en curso: el nuevo proceso constituyente, la reforma tributaria, la reforma al sistema de pensiones y la reforma al sistema de salud. Cuatro, en un período de gobierno que dura cuatro años y del que quedan tres. ¡Vaya qué coraje!

Sobre todo, por los efectos que se producen en los mercados, particularmente, a nivel de inversión. De acuerdo con el Índice de Confianza Económica publicado por Deloitte, el 63% de los encuestados cree que la fuente de incertidumbre en su industria o empresa se debe al contexto político y económico nacional; solo un 3% lo atribuye al contexto internacional, y un 34% cree que se debe a ambos. Entre los factores locales que explicarían esta incertidumbre, se encuentra la falta de certezas jurídicas y el rechazo de proyectos (42%), la reforma tributaria (12%), el nuevo proceso constituyente (12%) y la inflación (12%), entre otros. Al preguntar por las inversiones 2023, más del 50% de las preferencias señalan que serán en el extranjero o que no habrá.

Estos resultados son consistentes con la agenda mensual de Criteria para enero 2023, en la que prima un pesimismo importante respecto de la situación económica del país y personal.

¿No será momento, entonces, de cambiar la retórica del miedo? A estas alturas, es difícil creer que el empresariado y sus representantes estén asustados; pensaría más bien que hay incredulidad frente a la porfía mostrada por el Gobierno y sus autoridades para abordar un escenario económico tan complejo. Basta de querer reformarlo todo. Basta de buscar enemigos donde no los hay. Basta de acusar hermetismo y falta de disposición a conversar, cuando no ha habido invitación para ello. Basta de polemizar por la prensa.

ELISA GIESEN SOCIOLOGA Y SOCIA DE GESTIÓN SOCIAL.